Mostrando entradas con la etiqueta ahorro. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ahorro. Mostrar todas las entradas

miércoles, 2 de febrero de 2011

Más valioso que oro

Cuando Salomón vino a ser rey, él quiso ser tan grande como su padre David…pero el clímax de su prioridad no fue un reino más grande o complacer a la gente mejor que su padre. El deseo de Salomón no fue tener más riquezas que su padre o ser más conocido que David. El deseo de él fue…ser sabio…y él le pidió sabiduría al Señor.
Salomón sabia que enfrentaría crisis en su reino y tendría que tomar duras y sólidas decisiones- Salomón complació al Señor por pedir sabiduría y no riquezas, porque al pedir sabiduría se estaba capacitando para gobernar al pueblo de Dios de la mejor manera posible.
Hoy necesitamos pedirle al Señor sabiduría también, de nada nos sirve agotarnos este día en el trabajo queriendo ganar más y más dinero.
¿De qué nos sirve comprar más y más cosas o ser más y más reconocidos en el mundo de los negocios, si no tenemos la sabiduría que Dios da?
¿Qué es sabiduría? Sabiduría es lo opuesto a confianza en sí mismo. Sabiduría es tomar decisiones y seguirlas pero confiando plenamente en Dios.
En cualquier momento de este día necesitamos hacer tiempo para consultar con Dios y decirle: ¿Señor estás de acuerdo con esta compra? Señor: ¿Quieres que se haga esta inversión o no? Debemos procurar recibir de él la orientación en la quietud del corazón. La sabiduría que hoy necesitamos es más preciosa que el oro y ninguna cosa que pueda desear es comparable a ella. Prov 8:11 nos dice: “Vale más la sabiduría que las piedras preciosas,
y ni lo más deseable se le compara.”
Necesitamos la sabiduría que Dios ofrece para tomar las decisiones financieras que enfrentaremos este día. Que nuestra oración sea “Señor, hoy quiero tener en mi corazón el mismo sentir de Salomón. No me des riquezas…ni fama….pero dame sabiduría”

Felíz día para todos.

jueves, 13 de enero de 2011

martes, 11 de enero de 2011

Ahorra tu aumento

¡Los aumentos salariales son mayores! La compañía de consultoría de recursos humanos Buck Consultants estima que la mayoría de las compañías aumentará el sueldo de sus empleados en un promedio de 3% en 2011, por encima del 2% en 2009.

Si ganas 100,000 dólares, eso equivale a 2,000 dólares al año después de impuestos. ¿Te parece poco? Lleva ese dinero directamente a una cuenta con ventajas fiscales como una cuenta de ahorro individual Roth cada año, y tu dinero crecerá con plazos fiscales, dándote 139,522 dólares adicionales en 30 años, asumiendo un rendimiento anual conservador de 5%.

"El dinero podrá lucir poco sustancial en este momento, pero te servirá de mucho a la larga", dice el planeador financiero Frank Boucher, de Reston, Virginia.

fuente: cnnexpansion.com

lunes, 19 de julio de 2010

Enseñando a nuestros hijos a ahorrar

Son pocos los años que transcurren desde que los niños juegan con billetitos sin valor hasta que se enfrentan a decisiones reales que tienen que ver con el dinero. Este tiempo es muy importante para enseñarles cómo manejar sus "moneditas". Una de las primeras tareas es fomentarles el hábito del ahorro. Pero ahorrar por ahorrar no llamará su atención. Por eso te sugiero acompañar este esfuerzo de una meta, que en todos los casos debe ser real, alcanzable y adecuada a la edad del niño. Por ejemplo: para un pequeño en edad preescolar una meta puede ser comprar un dulce el fin de semana, mientras que para uno que curse la primaria puede ser adquirir un juguete. Otro aspecto que debes considerar es tener un lugar específico para guardar el ahorro. Puede ser desde una alcancía elaborada por ellos mismos hasta diferentes cuentas de ahorro diseñadas especialmente para pequeños. Busca formas extra para motivarlos: una manera divertida y atractiva que encontré para enseñas a mis hijas es elaborar tres alcancías diferentes que hicimos nosotros mismos de cartón y mis hijas las decoraron a su gusto (esto fue algo muy emocionante para ellas)
Cada alcancía tiene un propósito o un destino determinado para el dinero: la primera y más importante está destinado para dar (dar a la iglesia, compartir con los más necesitados y ayudar a quienes ellas quieran). La segunda alcancía tiene el propósito de ahorrar (para algún juguete o algo que ellas desean comprar) y la tercera es para gastar (este dinero está disponible para los dulces y golosinas que quieran comprar cuando gusten). El énfasis es establecer un orden de prioridades así como lo mostré. Primero los demás, luego nuestras metas y entonces nuestros deseos.
Esto es solamente una recomendación, pero depende de cada hijo y sus padres lo que quieran hacer.
Toma en cuenta estos consejos
Educa con el ejemplo: si tus hijos ven que despilfarras el dinero y no destinan nada al ahorro, ellos harán lo mismo.Cuando tu hijo alcance una meta felicítalo y acompáñalo a comprar el objetivo de su ahorro.Con el paso del tiempo fijen metas más ambiciosas. Esto hará que tu hijo se esfuerce más en ahorrar.Puedes asignarle tareas pequeñas en el hogar, que no afecten su rendimiento en la escuela, y a cambio otorgarle una pequeña cantidad de dinero. Le estarás enseñando que el dinero es el pago a un esfuerzo o trabajo.Un hábito se fomenta con el tiempo, por ello, el ahorro debe ser constante.
Proverbios 22:6 "Instruye al niño en su carrera: Aun cuando fuere viejo no se apartará de ella." Es nuestro deber enseñar a nuestros hijos en todas las áreas de la vida y una de ellas es sin lugar a dudas el aspecto financiero.

jueves, 25 de marzo de 2010

8 tips para planear vacaciones y ahorrar

Para que las vacaciones de tus sueños no se conviertan en una pesadilla financiera es necesario planear y tener un presupuesto que te diga cuánto puedes gastar y cómo, de acuerdo con expertos.
Lo mejor es anticiparse al menos dos meses para hacer reservaciones, sobre todo cuando tu viaje coincide con temporadas altas, o sea cuando todos tienen vacaciones, como en el caso de fin de año, Semana Santa y verano, dice la asesora de agencias de viajes, Karina García.
Si quieres viajar en diciembre aún estás a tiempo, pero debes empezar ya para evitar sorpresas y lograr algunos ahorros, señala la experta.
Los destinos preferidos por los mexicanos para viajar en vacaciones son la playa, seguidos de ciudades como Guadalajara, Monterrey y Tijuana, de acuerdo con datos de la Procuraduría Federal de Consumidor (Profeco).
"Planear tu viaje y tener un itinerario definido hace una gran diferencia en cuanto a gastos se refiere (...), ya que al contemplar cada gasto se pueden agregar o eliminar actividades y ahorrar hasta un 30%", dice el consultor en finanzas personales, Salvador Tamayo.
Antes de hacer la maleta
Para iniciar las vacaciones con el pie derecho, toma en cuenta estos consejos:
1. Lo primero que debes saber es qué tipo de vacaciones quieres, si deseas algo para descansar, hacer turismo de aventura, etc, ya que en base a esto podrás determinar la duración del viaje y aproximar un costo total.
2. Una vez que has decidido el lugar, García recomienda informarte acerca de sus atractivos, el promedio de sus precios y los servicios disponibles. Un buen ejercicio es cotizar el viaje en al menos tres agencias y hacerlo también por tu cuenta, para que decidas la opción más conveniente.
3. Recuerda que el costo de transporte varía si viajas en automóvil propio, rentado, autobús o avión. Evalúa cada posibilidad y presupuesta. La forma más cómoda de viajar es en automóvil propio, pero debes agregar el costo de mantenimiento y un chequeo de prevención para evitar accidentes. La opción más económica es el autobús, que además ofrece seguros de viajero y da garantías en caso de atrasos o cancelación de ruta.
4. Si ya tienes una idea general del costo aproximado haz un plan para cada día con itinerarios. Para que esté completo lo mejor es determinar lugares para visitar o actividades y costos. En este apartado debes incluir un gasto diario promedio que incluya tarifas de entrada, costo de actividades, transporte, alimentos, etcétera.
5. Uno de los mayores costos de viajar, después del transporte es el hospedaje, por lo que debes poner especial atención en este punto. Para elegir mejor determina cuánto tiempo pasarás en el hotel, por ejemplo si es sólo para dormir y bañarte, puedes optar por algo cómodo pero económico. Si sueles pasar gran tiempo en el hotel y necesitas de la tecnología y todas las comodidades de la ciudad, tu opción deberá ser más lujosa.
6. Otro rubro importante que casi nadie toma en cuenta (y donde hay más fugas de dinero), son los recuerdos o regalos para familiares y amigos, ya que aunque sean pequeños gastos, acumulados pueden sumar grandes cantidades. Los expertos recomiendan poner nombre a cada obsequio y fijar un tope máximo por souvenir.
7. Si tienes unas finanzas saludables, puedes aprovechar tu tarjeta de crédito para adquirir paquetes de alguna agencia, ya que este tipo de ofertas generalmente presentan buenos descuentos o pueden pagarse a meses sin intereses. Los especialistas sólo aconsejan utilizar el plástico cuando se podrá pagar sin "ahorcar" otros gastos. Otra ventaja de usar este instrumento es que al pagar las vacaciones con una tarjeta de crédito puedes ampararte con los seguros de viajero que generalmente ofrecen.
8. Finalmente y una vez que hayas contemplado todas las variables, puedes recortar gastos al agregar actividades según el costo previsto. Sin embargo y aunque tengas todo planificado, recuerda que siempre debes disponer de un 10 o 20% de tu presupuesto para hacer frente a cualquier imprevisto.
Recuerda que nunca debes gastar más de lo que puedes pagar, ya que por muy tentadoras que sean las vacaciones, al regresar la deuda puede borrarlas y transformar el viaje en una pesadilla.

miércoles, 29 de abril de 2009

Libertad Financiera

video 1


video 2


video 3

lunes, 27 de abril de 2009

Cuidado con los gastos "hormiga"

De acuerdo con la Profeco al año se gastan más de 12 mil pesos en pequeños gastos como el cafecito diario, papas fritas, refresco, la revista, dulces y propinas. Además los “viene, viene” y limpiavidrios son otros 50 pesos por semana. Estos caprichos diarios, cual hormigas en fila, representan fugas inconscientes que pueden devorar el ingreso mensual y hacer daño en el presupuesto más riguroso. Si hacemos cálculos podemos llegar a la conclusión que anualmente con la suma de estos gastos "hormiga" fácilmente podríamos gozar de un viaje con la familia a alguna playa de nuestro país.
Desafortunadamente por no contar con un control de estos pequeños gastos jamás salimos de vacaciones o no realizamos algunas mejoras en nuestro hogar. Si tan solo redujéramos éstos gastos a la mitad podríamos comprar un paquete por 5 días y 4 noches en un hotel cuatro estrellas a Ixtapa ($4,400.00).

Consideraciones sobre los gastos hormigas:
Los pequeños gastos diarios afectan las finanzas personales.
El no administrar bien los recursos económicos ocasiona gastos en productos no pensados o compras por impulso.
Estar consciente de estas pequeñas compras, y dejar de hacerlas, equivaldría en promedio al consumo mensual de gasolina de un auto compacto o al cabo de un año a un viaje todo pagado a la playa para dos personas.
Antes de gastar, haz cuentas y no te emociones.

Tips para combatir los gastos “hormiga”:
Analiza los pequeños gastos que se realizan cada día.
Compra menos caprichos.
Considera el porcentaje de las propinas en los consumos.
Registra cada compra o gasto en una libreta.
Destina un monto específico por semana para los 'pequeños' gastos.

Lo más importante para eliminar los gastos hormiga es que necesitamos visualizar un objetivo. Por ejemplo: el refresco y las galletitas de media mañana se pueden convertir en seis meses en un fin de semana en la playa.
Sin un análisis cuantitativo como éste respecto a los pequeños gastos que nos permita identificar el efecto económico en nuestro bolsillo, les restaremos importancia porque no sabemos como afectan realmente a nuestras finanzas.
En la Biblia encontramos un pasaje que ilustra perfectamente la importancia de prestar atención a los pequeños gastos si queremos controlar nuestras finanzas. (Cantares 2:15) “Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que destruyen las viñas. Porque nuestras viñas están en flor.”
Traduciendo esto a un lenguaje financiero diríamos que los “gastos hormiga” son las “zorras pequeñas”. Zorras; son pequeños animalitos que se meten en los viñedos y se comen el fruto, echando a perder la cosecha. Por ser pequeños se meten por cualquier agujerito, por su astucia y agilidad se hacen difícil de cazar, pero el daño que causan es grande. Esto es un reflejo de nuestra situación financiera, de como los gastos pequeños llegan a afectar y golpear nuestro presupuesto familiar.
Muchas veces prestamos demasiada atención a los gastos más significativos como alimentación, educación, gastos médicos y transporte, pero descuidamos los gastos “hormiga” que nos atacan diariamente y debilitan nuestra economía.
Recuerda que el consumo consciente lleva tus decisiones sobre el dinero de un plano emocional a uno racional, cuestionando si aquello que se va a comprar tiene una razón de ser, más allá del simple impulso. Demandemos sabiduría a nuestro Dios para controlar de una mejor manera nuestros gastos y de ese modo poder administrar correctamente nuestras finanzas.

sábado, 18 de abril de 2009

Tips para ahorrar gasolina

1.- Llene el depósito a primera hora de la mañana.
La razón es que la temperatura ambiente y del suelo es más baja y las densidades de la gasolina y del gasóleo son menores.
Si usted llena el depósito al mediodía, por la tarde o al anochecer, el litro de combustible no será un litro exactamente.
2.- Cuando eche gasolina no apriete la manilla del surtidor al máximo, ya que, según la presión que se ejerza sobre ésta, la velocidad del surtidor puede ser lenta, media o alta. Al surtir más lentamente, se origina menos vapor y la mayor parte del vertido se convierte en un llenado eficaz.
Si usted llena el depósito apretando la manilla al máximo, un porcentaje de la gasolina que entra en el depósito se transforma en vapor y vuelve por la manguera del surtidor al depósito de la estación de servicio. De esta manera, se consigue menos combustible por el mismo dinero.
3.- Llene el depósito antes de que éste descienda a la mitad de su capacidad.
Si llena su tanque de combustible cuando éste se encuentra a la mitad de su capacidad, la gasolina rendirá más, porque a mayor cantidad de combustible menor cantidad de aire en el depósito y, en consecuencia, menor evaporación.
4.- No llene el depósito en el momento en que se estén rellenando los tanques de la estación de servicio ni inmediatamente después.
Durante esa operación se remueven los sedimentos del fondo de los tanques, con lo cual usted corre el riesgo de cargar combustible sucio.
El tener combustible sucio es siempre menos eficaz y más perjudicial para el rendimiento de su motor.
Ponga en práctica estos sencillos consejos que le ayudarán a ahorrarse unos cuantos pesos que podra utilizar de una mejor manera.

lunes, 13 de abril de 2009

3 Principios básicos para enfrentar imprevistos

Como ya sabemos nuestra riqueza está conformada por el dinero que tenemos en efectivo, cuentas bancarias, bienes materiales, papeles negociables, inversiones, profesión, etc. Todos estos recursos nos ayudan en la realización de nuestras actividades diarias y constituyen nuestras finanzas personales. Este concepto nos muestra la realidad económica de una persona y el comportamiento que tiene para manejar sus recursos. Pero ¿Cómo lograr tener unas finanzas saludables que nos permitan enfrentar cualquier imprevisto?

1.- No gaste más de lo que gana. Debe ser cuidadoso y no permitir que sus gastos excedan sus ingresos, porque de lo contrario estará recurriendo a algún tipo de deuda para cubrir esa parte que está gastando de más.
Proverbios 22:7 dice: “El rico se enseñorea de los pobres, y el que toma prestado es siervo del que presta”. Lo que este versículo nos quiere decir es que evitemos lo más que podamos estar endeudados. La mejor manera para lograr esto es viviendo de acuerdo a nuestras posibilidades y no excedernos en nuestros gastos.
2.- Elabore un presupuesto. Debe aprender a administrar muy bien el dinero que recibe y la mejor herramienta que puede utilizar es el presupuesto familiar. Este presupuesto le permitirá conocer la cantidad de gastos que tiene respecto a los ingresos que recibe, de esta manera podrá darse cuenta en que cosas está gastando de más y podrá hacer los ajustes necesarios para mejorar sus finanzas.
Prov. 27: 23 dice “Considera atentamente el estado de tus ovejas, cuida a tus rebaños” En otras palabras la Biblia nos dice que hay que llevar registros claros de todo lo que tenemos y gastamos.
3.- Ahorre una parte de sus ingresos. Proverbios 6:6-8 dice "Ve a la hormiga, oh perezoso mira sus caminos, y sé sabio; la cual no teniendo capitán, ni gobernador, ni señor, prepara en el verano su comida y allega en el tiempo de la siega su mantenimiento". Contar con dinero ahorrado le ayudará a alcanzar sus metas, enfrentar algún imprevisto así como también a mejorar su calidad de vida. Los especialistas recomiendan ahorrar un 8% del total de los ingresos. Si a usted se le hace difícil este porcentaje entonces empiece con lo que pueda, no importa que a usted le parezca insignificante esa cantidad lo importante es que se acostumbre a ahorrar. Con el paso del tiempo esto le ayudará a hacer de esta costumbre un hábito maravilloso.
Si usted sigue estos 3 principios sencillos, pero básicos de finanzas personales tenga la seguridad que experimentará una mejoría en su situación financiera y estará listo para enfrentar cualquier imprevisto que se le pueda presentar.

sábado, 14 de marzo de 2009

10 consejos para ahorrar en el supermercado.

Consumer Reports, una organización sin fines de lucro que se ha transformado en una de las fuentes de mayor confianza sobre productos y servicios para el consumidor en Estados Unidos, presentó sus 10 consejos para ayudarte a ahorrar dinero en el supermercado.
1. Haz una lista y apégate a ella. No hagas las compras con hambre, así evitarás comprar de más.
2. Considera productos con la marca de la tienda. Son considerablemente más baratos y, con frecuencia, al menos tan buenos como los de una marca más conocida.
3. Compara precios en diferentes partes de la tienda. Por ejemplo, el queso en la sección gourmet de la tienda es a menudo más caro que el queso rebanado o en bloque en la sección de productos lácteos.
4. Lo fácil cuesta más. La comida preparada o rebanada frecuentemente es más cara. De manera similar, pagarás más por porciones individuales, como por ejemplo el cereal en platos desechables.
5. Presta atención a los productos ofrecidos en los anaqueles al final del pasillo. Estos escaparates tienden a ser el destino final de mercancía cerca de su fecha de expiración. Así que revisa la fecha de caducidad con cuidado.
6. Compara el precio por unidad. De acuerdo a varios estudios, los paquetes grandes regularmente son más económicos, pero no es siempre el caso. En uno de estos estudios, la Comisión Federal de Comercio (FTC) de Estados Unidos reportó que el atún enlatado, la crema de cacahuate, el café instantáneo y el jugo de naranja congelado casi siempre eran más caros en sus paquetes más grandes. Es muy importante que compares el precio por unidad (por litro, kilo, etc.) cuando un tamaño está de oferta.
7. Recorta cupones. Revisa las ofertas que vienen en los periódicos del domingo y busca los cupones. Pero no compres un producto que no comprarías de otra manera sólo porque tienes el cupón.
8. Consigue una tarjeta de la tienda. Con una tarjeta de cliente recibirás descuentos automáticos de los que se ofrecen en el periódico de la tienda sin necesidad de cortar los cupones.
9. No asumas que todos los artículos anunciados en el periódico de la tienda están de oferta. Los fabricantes pueden haber pagado por el anuncio.
10. Cuídate de las tentaciones de último minuto. Los tentempiés en una porción individual, que usualmente están cerca de la caja registradora, cuestan más que los paquetes con más cantidad del mismo producto que están en el pasillo.

Hoy más que nunca hay que tomar muy en serio estos consejos y empezar a practicarlos. Veremos poco a poco como experimentamos un mejor rendimiento de nuestro dinero al estar evitando gastos inncesesarios. Nos daremos cuenta cómo muchas veces nuestras constumbres nos han llevado a gastar más de lo indispensable simplemente por no poner atención a los gastos que consideramos pequeños.
Espero que puedan aplicar estos ocnsejos y que les resulte de beneficio para gozar una mejor salud financiera.

domingo, 11 de enero de 2009

Es tiempo de ahorrar

Es cierto que la crisis que el mundo enfrenta será fuerte y que le puede pegar a muchos. Pero, precisamente, en este tipo de circunstancias desfavorables, el ser humano tiende a volverse más creativo y lucha por salir adelante. Éstos son buenos momentos para educarse en la manera como consumimos, y para ser muy precavidos en las decisiones que pueden afectar la economía del hogar.
Éstos son tips que ofrecen los expertos para cuidar el dinero.
La salud
Es mejor ir a revisiones médicas periódicas para checar tu estado de salud y poder atacar las enfermedades en sus inicios. Tratar enfermedades cuando ya están muy desarrolladas suele ser, además de más difícil, mucho más costoso.También se recomienda guardar los medicamentos sobrantes cuando acabas un tratamiento. De esta manera, si el médico vuelve a recetar esta medicina, ya tienes reservas.
El súper
Si quieres que tu dinero rinda en el súper, es indispensable que hagas una lista de los alimentos y productos de limpieza básicos que necesitas antes de salir de tu casa. De esta manera irás directo por estos artículos y no estarás recorriendo los pasillos y comprando cosas que muchas veces no necesitas.Otra recomendación es hacer un verdadero comparativo de marcas y tiendas. Muchos supermercados ofrecen productos con descuento, pero si se compara toda la compra, algunas tiendas tienen mejores precios.
Las tarjetas
En tiempos de crisis, lo primero es afrontar que se tiene una deuda y después informarte sobre todos sus detalles: tipos de taza, montos, plazos y riesgos. Después, hay que hacer un plan de pagos.Intenta renegociar las deudas con los bancos, con tazas fijas y a plazos tan largos como te convengan. Pero siempre debes cumplir y a la vez tratar de quedarte con efectivo. Usa la tarjeta de crédito sólo cuando sea necesario. Trata de no contraer nuevas deudas.
Los servicios
Cambia las lámparas tradicionales por ahorradoras de energía. Aprovecha todo lo que puedas la luz del día. Checa cuántos watts consumen los aparatos.Para ahorrar agua, por ejemplo, puedes colocar regaderas y sanitarios economizadores, y obviamente acortar el tiempo del baño. Cuidar el gas es fácil si tratas de cocer alimentos en ollas exprés, si mantienes los pilotos apagados y usas el horno sólo cuando es necesario. Trata de usar el teléfono de línea lo más posible, evitando al máximo las llamadas innecesarias en celulares.
La educación
Una gran "rebanada" del presupuesto familiar se va en las colegiaturas de los hijos, sobre todo si éstos acuden a una escuela privada. Para ahorrar en la educación de tus hijos, sin sacrificar calidad, puedes aprovechar los descuentos que existen en algunos planteles que ofrecen rebajas por pagar de contado o por adelantado, claro, si tu bolsillo te lo permite. Enséñale a tus hijos a cuidar sus útiles para que sirvan durante todo el período escolar.
Transporte
Para ahorrar gasolina se sugiere limitar el uso del aire acondicionado, no acelerar bruscamente y tratar de manejar a una velocidad constante. Otra cosa que puedes hacer es planear bien tus recorridos, para que de una sola salida hagas las vueltas que necesites; también puedes hacer viajes con amigos, compañeros o vecinos y así todos ahorran gasolina y benefician al medio ambiente.
Entretenimiento
Come fuera de casa lo menos posible, o bien, limitar tus visitas a restaurantes a una vez a la semana. Busca en internet los cupones de descuento para ciertos restaurantes o parques de diversión. Visita museos o parques naturales cercanos a tu comunidad que tal vez no conoces y cuya entrada es de bajo costo o hasta gratuita.

Fuentes: Edwin Abán Candia, director del Departamento de Economía del Tec de Monterrey; Jorge Garza, profesor titular del departamento de Economía de la UDEM; Ramón Ruiz, director de Arquitectura Financiera; Juan Enrique Nápoles, médico general, y Profeco.

martes, 2 de diciembre de 2008

Las hormigas y nuestro retiro

El tema de nuestro retiro o jubilación es algo que casi nunca tratamos o lo dejamos para cuando estemos más grandes o cuando nos estamos acercando a ese evento. Pero la realidad es que deberíamos empezar a planificar nuestro retiro desde que estamos jóvenes, en ese valioso tiempo cuando nuestra vida productiva es buena y saludable.
La etapa del retiro debe ser una época satisfactoria, en la que se pueda abandonar el trabajo formal y dedicarse a actividades que siempre se quiso hacer, como viajar, tener un pasatiempo, iniciar un nuevo empleo o dedicarle tiempo a la familia. Sin embargo, no es extraño encontrar personas en edad de retiro trabajando debido a que no ahorraron correctamente para mantener su nivel de vida en la jubilación (no quiero con esto decir que sea malo trabajar después de jubilarse).
Sin lugar a dudas la herramienta numero uno para prepararnos para nuestro retiro es el AHORRO. Hay muchas maneras de ahorrar y las instituciones financieras nos ofrecen una diversidad de servicios para administrar nuestro ahorro para el retiro. No debemos confiarnos en que el ahorro exclusivo en las Afores garantizará un buen nivel de vida después de jubilarnos. Para garantizar una jubilación que sea satisfactoria es recomendable comenzar a planearla con varios años de anticipación y si es posible hacer aportaciones voluntarias a nuestra afore o si lo deseamos en cualquier tipo de ahorro con alguna institución bancaria, inclusive en alguna caja de ahorro que tenga la empresa en la que trabajamos.
Es necesario saber cómo los cambios económicos a nivel mundial modifican los esquemas de retiro. Con la crisis que estamos mirando nos podemos dar cuenta cómo nuestro dinero a perdido valor, debido a que las controladoras de nuestras afores invierten nuestros fondos en las bolsas de valores y ante un ambiente de incertidumbre y de preocupación por los mercados financieros, esos fondos han tenido perdidas significativas. Si eres de las personas que acostubran a leer las letras chiquitas de tu estado de cuenta de la afore, te podrás dar cuenta que en general la pérdida a sido del 5 o 6 % en tus ahorros.
Hay que recordar el sabio consejo que encontramos en el libro de Proverbios 6:6-8 "Ve á la hormiga, oh perezoso mira sus caminos, y sé sabio; la cual no teniendo capitán, ni gobernador, ni señor, prepara en el verano su comida y allega en el tiempo de la siega su mantenimiento".
Que consejo tan acertado para nosotros hoy en día. Debemos ser sabios y prepararnos desde ahora para el tiempo de nuestra jubilación. Hoy más que nunca hay que cuidar bien nuestros trabajos, administrar mejor nuestros recursos, nuestras fuerzas, nuestra salud tratar de disminuir el consumo y ahorrar más para tener una jubilación más placentera.
Un consejo que puedo dar a los jóvenes que apenas están terminando una carrera y muy pronto se unirán a la fuerza laboral de este país es que no se confundan pensando que falta mucho para el retiro. Los años pasan rápido y si no nos preparamos desde ahora, entonces nuestro nivel de vida en la jubilación se mirará fuertemente afectado por las malas decisiones que tomamos en nuestra juventud.
Así que como hormiguitas: trabajando y ahorrando

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Decálogo para enfrentar la crisis

1.- Prioriza tus necesidades para comprar lo que realmente necesita tu familia. Cada individuo o familia tiene necesidades propias, por lo que es necesario analizar y ordenar los gastos según su importancia, identificando aquellos que son indispensables. También se aconseja preguntarse lo que se va a comprar, de contado o a crédito, realmente es necesario.
2.- Compara precios y calidades con objeto de aprovechar la competencia entre proveedores. La investigación previa es básica para realizar una buena compra, lo que requiere tiempo, con la posibilidad de identificar ofertas o promociones de los artículos a adquirir.
3.- Paga a tiempo tus deudas y así evitarás el pago de intereses. La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) aconseja liquidar el saldo de las tarjetas de crédito en la fecha que indica el estado de cuenta, para así construir un buen historial crediticio.
4.- Ahorra en la medida de lo posible, para obtener un mejor provecho de tus ingresos en el futuro. Fomentar la cultura del ahorro es un trabajo en equipo en el que debe participar la familia.
5.- Establece metas realistas para identificar deseos posibles. Se recomienda fijarse un objetivo específico, factible de medir y con una fecha de cumplimiento para alinear el esfuerzo financiero, lo que permitirá tener unas finanzas sanas y no tener sobresaltos.
6.- Haz un gasto consciente y evita las compras por impulso. No planear el uso del ingreso puede provoca gastos innecesarios que desajusten las finanzas familiares. Se recomienda llevar cada gasto a nivel consciente, cuestionando si lo que se va a comprar tiene una razón de ser.
7.- Utiliza el crédito a tu favor, no adquieras deudas que no puedas pagar. El crédito y las tarjetas de crédito son muy útiles para adquirir bienes o servicios que difícilmente se pueden comprar en efectivo, pero se utilizan de manera irracional se pueden convertir en un problema.
8.- Reduce deudas a fin de no destinar una parte importante de tu ingreso a su pago. Para diseñar una buena estrategia de reducción de deudas es necesario identificarlas y, si es el caso, reconocer que existe un problema.
9.- Analiza tus finanzas familiares con objeto de elaborar un presupuesto que te permita cumplir tus metas. Conocer ingresos, gastos, activos, deudas y ahorros permitirá el mejor aprovechamiento de los recursos, los cuales siempre son limitados.
10.- Elabora un plan de gastos con la finalidad de ajustar tus desembolsos, para distribuir los ingresos de forma que se satisfagan las necesidades de la familia.

lunes, 10 de noviembre de 2008

Diferencia entre Ahorro e Inversión

No existe una definición concreta de la diferencia, de hecho podemos considerar lo siguiente para el propósito de explicarla tanto para los productos, servicios e instrumentos, como para las instituciones que los ofrecen o donde se pueden adquirir:
Ahorro.- Cantidad de dinero, usualmente llamada capital, guardado para un uso posterior. Como se busca conservar un capital se desea que la forma en que se guarda (colchón, alcancía, banco, ...) no tenga riesgo.
Inversión.- Cantidad de dinero que en lugar de sólo guardarla se busca incrementarla, es decir que valga más que el capital original. Para poder lograr este incremento el dinero se deposita con mayor riesgo que cuando solamente se ahorra.
No existe una frontera definida entre “ahorro” e “inversión” por lo que se deben tomar algunos elementos para ajustarse a las necesidades particulares de cada persona, entre los elementos más fáciles de mencionar están:
Seguridad : está directamente relacionada con la confianza o garantía de que los depósitos de ahorro o inversión serán devueltos. Actualmente sólo las operaciones con bonos del ahorro nacional que realiza el Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi) cuentan con garantía de pago incondicional del Gobierno Federal. Los bancos comerciales nacionales hasta determinada cantidad a través del seguro de depósito con el IPAB (Instituto para la Protección al Ahorro Bancario), aseguran devolver los depósitos iniciales más sus intereses. En el resto de las instituciones financieras o instrumentos siempre existirá la posibilidad de no recuperar el capital inicial ahorrado o invertido.
Riesgo : está relacionado con la ocurrencia de ciertos eventos que afectan la capacidad de obtener el ahorro o la inversión deseados, y en ocasiones la pérdida de éstos y/o parte de nuestro patrimonio.
Certidumbre / Incertidumbre : es la seguridad de conocer en este momento el valor final de un depósito en ahorro o inversión. Es muy común ver asociado este término con los conceptos de Renta Variable y Renta Fija; aquí se deben tomar en cuenta la volatilidad y el tiempo (plazo).
Volatilidad: Grado en que varia o fluctúa el precio o interés del instrumento a través del tiempo. Se relaciona de forma muy cercana con el riesgo, pues implica la probabilidad de que suceda un evento que afecte el valor final del depósito de ahorro o la inversión.
Plazo: Si aumentamos el tiempo que se mantiene un depósito de ahorro o una inversión, dependiendo del tipo de instrumento y su volatilidad, es más difícil saber cuanto se tendrá al final del plazo o varios plazos, puesto que los factores que afectan los precios y la tasa de interés van cambiando. En la medida en que transcurra un mayor plazo, es mas probable que ocurran más eventos, favorables o desfavorables.
fuente: condusef

jueves, 10 de enero de 2008

Mejor aprenda a resolver sus problemas financieros


Me encontré un artículo muy interesante en la sección de finanzas del periódico "el economista" http://www.eleconomista.com.mx/ que quiero compartir con todos ustedes.

Habla sobre recomendaciones para poder salir adelante con nuestros problemas financieros, ya que es muy común que a principio de año tengamos dificultades con la famosa "cuesta de Enero".

Recuerde que el mal uso de tarjetas y las compras excesivas, entre otras actitudes, podrían llevarlo a cargar una serie de deudas a veces impagables. Recuerde que, a pesar de que no existen soluciones mágicas, sí hay sugerencias que le pueden ayudar a enfrentarlas.
Pongamos atención a ellas:


Como ya hemos mencionado, no existen reglas mágicas que puedan sacar a todo el mundo de sus problemas financieros.
Sin embargo, sí hay algunas sugerencias que nos pueden ayudar, mismas que presentaremos a continuación.
Si uno tiene familia, es importante que todos participen, ya que ninguna persona puede hacer el trabajo sola.
Por lo tanto, asegúrese de que su cónyuge y sus hijos entiendan que la familia está pasando por problemas financieros y acuerden, junto con usted, tomar los pasos que les ayudarán a recuperarse.
1. Formule un presupuesto realista, y apéguese estrictamente a él. Esto significa que tendrá que revisar periódicamente las cifras, y que tendrá que reajustar su gasto y sus hábitos de consumo.
2. No realice compras impulsivas. Cuando vea algo que no ha planeado comprar, no lo haga. Vaya a su casa y piense sobre eso. Ya verá que difícilmente volverá a la tienda para comprarlo.
Nunca porte dinero o tarjetas de crédito si no tiene pensado realizar alguna adquisición. Esto le evitará muchos dolores de cabeza.
3. Evite las “grandes baratas”. Comprar un artículo que vale 5,000 pesos a un precio rebajado de 4,000, no siempre se traduce en un ahorro de 1,000 pesos.
Si usted, para empezar, ni siquiera tenía la necesidad de adquirir ese objeto, significa que gastó 4,000 pesos de manera totalmente innecesaria.
4. Compre sólo lo que pueda pagar en el momento. Si no cuenta con los recursos financieros suficientes para realizar una adquisición, no lo haga basándose en su ingreso futuro, ya que algunas veces éste no se materializa.
Una alternativa es guardar todas sus tarjetas de crédito en un cajón bajo llave (o de plano, cancelarlas) y comprometerse a vivir sin crédito por un tiempo.
5. Evite altas rentas o pagos de hipotecas. Uno siempre puede cambiarse a algún lugar en donde tenga que pagar una renta menor.
En caso de tener un crédito hipotecario, considere un refinanciamiento si considera que no puede hacerle frente a su mensualidad actual, e incremente sus pagos en el momento en que sus ingresos suban.
6. Trate de no cancelar sus seguros. Si la situación apremia, puede tratar de recotizarlos, buscando una suma asegurada menor o un deducible mayor. No tenerlos podría significar un problema mayor.
7. Evite ser obligado solidario o fiador de un préstamo para otra persona. Su firma le obliga como si usted fuese el acreditado principal. Uno nunca puede estar seguro que la otra persona vaya a pagar.
8. Evite obligarse conjuntamente con otras personas que tengan hábitos de consumo cuestionables, incluyendo parientes cercanos. Si, por ejemplo, usted le da a algún pariente una tarjeta adicional, y éste incurre en alguna falta, usted será el responsable.
9. No haga inversiones de alto riesgo, como especulaciones con algún bien raíz o en bolsa. Por el contrario, cuando uno tiene problemas financieros debe invertir de manera conservadora, en certificados de depósito o pagarés bancarios, o en sociedades de inversión de liquidez diaria y con bajo riesgo asociado.
10. Encuentre alternativas para el gasto. Por ejemplo, en lugar de ir a un restaurante, puede organizar un día de campo familiar. Cuando alguien le proponga una comida, mejor sugiérale verse en el museo, o en una caminata por el parque. En lugar de comprar películas, considere verlas en televisión o sacar algún libro de la biblioteca.

sábado, 5 de enero de 2008

¿GASTAR O AHORRAR?


Existe un dicho muy popular en el ambiente de las finanzas personales que dice: “Si gastas más de lo que ganas, estás acumulando pobreza; si ganas más de los que gastas, estás acumulando riqueza”.
Parece un poco confusa esta declaración, pero en realidad no lo es; ya que si la analizamos cuidadosamente, esto es algo muy fácil de entender.
Veamos un ejemplo sencillo para comprender mejor este pensamiento:
Si la familia Hernández tiene un ingreso mensual de $10,000 pesos, y durante el mes tuvieron gastos de $9,500 pesos, ellos están ahorrando $500 pesos, en otras palabras, están acumulando riquezas por $500 pesos, los cuales podrán utilizar más adelante para hacerle frente a cualquier imprevisto de la familia. Por otra parte, la familia Pérez tiene el mismo ingreso mensual de $10,000 pesos, pero sus gastos fueron de $10,200 pesos, quiere decir que están acumulando pobreza por $200 pesos, porque tuvieron que recurrir a una deuda con alguien para poder cubrir todos sus gastos.
Según una encuesta realizada por Consulta Mitofsky, “en México sólo el 43% de los hogares acostumbran ahorrar alguna cantidad del gasto mensual”.
Podemos darnos cuenta que la cultura del ahorro en México no es todavía una costumbre y en algunos casos ni siquiera una posibilidad.
Desafortunadamente esto no es muy diferente en los hogares de nosotros los crisianos; a pesar de todos los conocimientos y luz que tenemos, muchas veces sufrimos por causa del dinero; pero esto no significa que no podemos cambiar la manera de manejar nuestras finanzas; la buena noticia es que si seguimos los consejos de Dios, El nos puede ayudar a mejorar nuestra situación financiera, para eso necesitamos en primer lugar reconocer a Dios como creador y dueño de todas las cosas, aún de nosotros mismos, de esta manera estaremos aceptando que todo lo que tenemos y poseemos no es de nosotros sino de nuestro Padre celestial y reconoceremos que somos simplemente mayordomos suyos, los cuales tenemos la obligación de cuidar fielmente lo que el Señor nos a confiado.
En segundo lugar necesitamos un plan financiero de acuerdo a nuestras necesidades para controlar los gastos y poder administrar sabiamente los recursos que tenemos.
La Biblia da consejos muy razonables a las familias acerca de la manera de hacer un plan financiero:
Prov. 27: 23
“Considera atentamente el estado de tus ovejas, cuida a tus rebaños ”
Para elaborar ese plan lo que debemos hacer es identificar cuáles de los gastos que realizamos son necesidades y cuales son deseos: Una necesidad es algo sin lo que usted no puede vivir: como comida, ropa y techo. Un deseo es algo que a usted le gustaría tener realmente, pero que puede ser sustituido por otra cosa. Teniendo en cuenta esto, es cuestión de elaborar un presupuesto que le ayude a controlar sus salidas de efectivo. Fíjese prioridades para gastar. Conozca sus límites y ajústese a ellos. Busque soluciones creativas y luego escriba su plan.
Es importante que dentro de su plan financiero (presupuesto) incluya una partida para el ahorro. Los especialistas recomiendan que éste corresponda mínimo al 8% de nuestros ingresos, es decir si ganamos $10,000 pesos; debemos ahorrar $800 pesos.
Proverbios 22:7 dice: “El rico se enseñorea de los pobres, y el que toma prestado es siervo del que presta”. Hay que tener en cuenta que siempre surgen imprevistos en las familias, y es mucho mejor tener un “colchón” al cual podamos acudir en caso de alguna emergencia, para no tener necesidad de recurrir a deudas o préstamos no planeados, los cuales causarían desajustes económicos en la familia y además nos hacen cautivos de nuestros acreedores.
Por último, la Biblia no prohíbe estar en deuda, pero sí nos recomienda que las evitemos lo más que se puedan. Recuerde que la clave está en controlar nuestros gastos y ahorrar lo más que se pueda. Bosquejar qué es lo que quiere y cómo conseguirlo le ayudará a hacerse cargo de su propia situación financiera, y a reducir un poco el estrés de la vida cotidiana al mismo tiempo que le brindará seguridad para su hogar.